Adiós al Chespirito, el eterno Chavo del 8

Chespirito
Foto: EL CHAVO DEL OCHO
Actualizado: sábado, 29 noviembre 2014 15:36

MADRID, 29 Nov. (EUROPA PRESS) -

   El actor mexicano Roberto Gómez Bolaños, conocido por sus personajes El Chavo del Ocho y El Chapulín Colorado, ha fallecido este viernes en Cancún a los 85 años.

   Gómez Bolaños, conocido por el alias de Chespirito, dedicó la parte final de su carrera a la producción, principalmente por los problemas de salud que acarreaba desde 2009. Entre sus dolencias, sufría varias enfermedades como diabetes y un enfisema pulmonar.

   Bolaños, que recibió el mote de Chespirito por la pronunciación en español del diminutivo de Shakespeare, ha dejado un hueco en los corazones de muchos de sus seguidores.

   "Roberto, no te vas, permaneces en mi corazón y en todos los corazones de tantos a los que nos hiciste felices. Adiós chavito hasta siempre", escribió en Twitter el actor Edgar Vivar, quien encarnaba al Señor Barriga en la serie El Chavo del Ocho.

EL CHAVO DEL OCHO Y EL CHAPULÍN COLORADO

   El Chavo del Ocho y El Chapulín Colorado fueron uno de los primeros shows que la cadena Televisa comenzó a exportar a comienzos de la década de 1970.

   Televisa interrumpió el viernes la transmisión de sus principales canales de televisión, así como de sus radios, para realizar una transmisión especial sobre su vida.

   "Se fue una figura permanente de la TV, una gran persona y un gran amigo, hasta siempre @ChespiritoRGB", dijo el director general de Televisa, Emilio Azcárraga.

   El presidente de México, Enrique Peña Nieto, también recordó al comediante a través de su cuenta de Twitter: "Lamento profundamente el fallecimiento de Don Roberto Gómez Bolaños, Chespirito. Mis condolencias a su familia".

   La estrella de la televisión, que estaba casado con Florinda Meza, la actriz que encarnaba a Doña Florinda, conmovió a millones de tele-espectadores, aunque algunos lo rechazaban porque consideraban a su humor demasiado simple.

   El domingo recibirá un homenaje en el estadio Azteca, la casa del club América, el equipo que idolatraba.