Germán Coppini en 5 canciones

Germán Coppini
Foto: FACEBOOK GERMÁN COPPINI Ampliar foto

Por David Gallardo

Germán Coppini nació en Santander en 1961 y su voz se apagó de manera fulminante en la nochebuena de 2013, llevándose como rehenes un buen puñado de canciones clásicas del pop rock en castellano.

Ya fuera con los primitivos Siniestro Total, con los elegantes y pretenciosos Golpes Bajos, o durante su zigzagueante carrera en solitario, Coppini siempre marcó distancia con las tendencias imperantes e imprimió su particular sello a un universo atormentado solo apto para paladares exquisitos.

En este repaso a su trayectoria musical en 5 canciones hay sitio para el salvajismo punk, el pop engolado, los escarceos electrónicos y los ritmos caribeños. Y sólo es una muestra de su amplio abanico de inquietudes musicales:

'TODOS LOS AHORCADOS MUEREN EMPALMADOS' (1982)

Junto a Julián Hernández y Miguel Costas, Germán provocó desde Vigo un terremoto de magnitud incuantificable numéricamente en toda la península. A pesar de estar en un vértice del mapa, los primeros Siniestro Total no dejaron títere con cabeza usando la fuerza de temas como 'Ayatollah!', 'Matar jipis en las Cies', 'Mario (encima del armario)' o 'Todos los ahorcados mueren empalmados'.

'MALOS TIEMPOS PARA LA LÍRICA' (1983)

De cantante punk pasó a ser elitista crooner al unirse con Teo Cardalda en Golpes Bajos, un proyecto tan diametralmente opuesto a Siniestro Total que le colocó en el ojo del huracán hasta el fin de los días, con acusaciones de 'traidor' y 'vendido'. Su valentía es de agradecer, pues originó canciones clásicas como 'No mires a los ojos de la gente' o 'Malos tiempos para la lírica'.

'EL LADRÓN DE BAGDAG' (1987)

En apenas un lustro, Coppini había pasado por dos formaciones icónicas de los ochenta en España. Siniestro Total y Golpes Bajos ya eran pasado y llegaba el momento de arrancar una carrera musical en solitario propiamente dicha con 'El Ladrón de Bagdad': cualquier parecido con sus trabajos anteriores es pura coincidencia.

'CARABAS' (1996)

Ser solista es complicado. Eso lo sabía de sobra Coppini, quien poco a poco fue quedando en la penumbra del foco mediático, mantenido por un grupo de acólitos fans entregados que le permitieron seguir con una carrera como artista de culto. Con giros incluso hacia los ritmos caribeños del álbum 'Carabas'. Haciendo del desconcierto su seña de identidad.

'NINGUNA SEÑAL' (2013)

Tras revisitar a ritmos rockeros el cancionero popular latinoamericano en 'Amérida Herida' a principios de año, 2013 estaba siendo bastante activo en lo musical para Germán. Su último proyecto suponía un regreso al pop maduro, adulto y elaborado poniéndose al frente de la banda Néctar. Tenían vocación de futuro pero ahora son inesperado epitafio.