Sucesos paranormales en el rodaje de Annabelle, precuela de Expediente Warren

Muñeca Annabelle
Foto: NEW LINE
Actualizado: viernes, 3 octubre 2014 13:32

MADRID, 1 Oct. (@CulturaOcio)

   El rodaje de Annabelle está dando mucho que hablar. Basada en un caso real de posesión demoníaca, como era el caso de su antecesora Expediente Warren, durante el rodaje de la película el director y también el productor de la misma aseguran que se han registrado sucesos paranormales en el set.

   John R. Leonetti, director de la nueva cinta, lo relata de manera escalofriante. "El primer incidente sucedió en un salón donde rodábamos", explicaba. El cineasta se fijó en una ventana llena de polvo cuando, de repente, "vi la marca de tres dedos entre la suciedad". "Era tan increíble que lo fotografié", relató a The Hollywood Reporter.

   Aunque lo peor estaba por llegar: "Rodábamos una escena en la que el demonio de la cinta perseguía a un conserje. Cuando este último se colocó cerca de una lámpara, esta se rompió y le cayó en la cabeza", explica Peter Safran, productor de Annabelle.

   En principio podrían parecer sucesos sin mayor importancia, fruto de la casualidad. Pero se convierte en algo bastante inquietante si tenemos en cuenta que el demonio de la cinta tiene tres dedos, igual que los de la ventana y que "el conserje de la película es asesinado en ese mismo pasillo", según explica Safran.

   La muñeca real de Annabelle se encuentra a día de hoy en el museo de la familia Warren, igual que aparecía en la película Expediente Warren: Encerrada en una urna de cristal. ¿Habrá encontrado una manera de seguir haciendo de las suyas?

AIRE FRESCO PARA EL TERROR

   Expediente Warren, estrenada en julio de 2013, fue todo un éxito entre el público, recaudando 318 millones de dólares en las taquillas de todo el mundo

   John Leonetti dirige esta segunda entrega, con un guión de Gary Gauberman. James Wan, el director de la primera, y Peter Safran son los encargados de producir la película que llegará a los cines españoles el 10 de octubre, siete días después de que se estrene en Estados Unidos.