VÍDEO: ¿Cuánto sabe George R.R. Martin de Juego de tronos?
Foto: GETTY
Actualizado: sábado, 20 diciembre 2014 10:40

MADRID, 20 Dic. (Culturaocio) -

   Bajo el título Cobardía corporativa, George R. R. Martin ha criticado en una entrada de su blog la decisión de Sony de no estrenar The Interview, la comedia sobre el asesinato de Kim Jong-Un, y ha ofrecido su propia sala de cine, situada en Santa Fe (Nuevo México), para proyectar la polémica cinta.

   "Ven a Santa Fe, Seth, nosotros proyectaremos tu película para ti", sentencia Martin al final de su escrito refiriéndose al director de la película, Seth Rogen (Superfumados).

   El creador da la saga literaria Canción de hielo y fuego califica la situación de "surrealista", y añade lo siguiente refiriéndose a Sony y a las grandes cadenas de salas de cine: "¿De verdad estas corporaciones gigantescas, que podrían comprar Corea del Norte con la calderilla que llevan en el bolsillo, están rechazando proyectar una película porque Kim Jong-Un se opone a que le hagan burla?".

   "Menos mal que estos tipos no estaban cuando Charlie Chaplin hizo El gran dictador. Si Kim Jong-Un los asusta, Adolf Hitler los habría hecho cagarse en los calzoncillos", comenta Martin en medio de su ácida crítica a Sony.

   Además, el escritor aclara que no ha visto The Interview y que ni siquiera sabe cómo de buena o mala es, pero que le desconcierta lo que podría ser una nueva Ciudadano Kane vaya a ser aniquilada antes de mostrarse al público por culpa de un poder extranjero y de unos hackers anónimos.

LA POLÉMICA VIENE DE LEJOS

   El mes pasado Sony Pictures sufrió un ataque informático perpetrado por un grupo de hackers que luego se reveló estaban relacionados con Corea del Norte. Además este grupo, conocido como Guardians of Peace amenazó con realizar ataques terroristas en las salas de cine donde se proyectase la película The Interview.

   El grupo de terroristas informáticos pro Kim Jong-Un aseguró que ellos podrían perpetrar su propio 11 de septiembre advirtiendo así de posibles ataques y considerando "malditos" a aquellos que vieran el film.

   Finalmente, pese al empeño del grupo por no ver la película difundida y a la situación de alarma en la que ha entrado tanto la compañía cinematográfica como el Gobierno de los Estados Unidos, ha sido inevitable la filtración en Internet de la escena más polémica de la película: la muerte de Kim Jong-Un.